‘GH DÚO’: José María Almoguera se queda a las puertas de la final y protagoniza une motivo encuentro con su madre
El hijo de Carmen Borrego no ha dudado en fundirse en un emotivo abrazo al reencontrarse con su madre en plató
No ha podido ser. Después de casi dos meses de concurso, José María Almoguera se ha quedado a las puertas de la final de tercera edición de Gran Hermano DÚO, convirtiéndose, junto a Romina, en uno de los últimos expulsados. Después de que Carlos Sobera pronunciara su nombre, el nieto de María Teresa Campos se mostró muy agradecido por la experiencia y se despidió de todos sus compañeros, especialmente de María ‘la jerezana’, que había regresado a la casa de Guadalix de la Sierra para convertirse en jefa de campaña.
Pero el momento más emotivo llegó cuando José María Almoguera hacia su entrada en plató y se reencontraba con su madre, a la que no dudó en abrazarla apasionadamente después de varios meses enfrentados y distanciados. Carmen Borrego no ha podía evitar las lágrimas, confesando que estaba convencida de que este momento sería el principio “de una bonita reconciliación” para “ya estar bien y solucionar por completo todo lo que hubiera que solucionar”.
La hermana de Terelu Campos aprovechaba para deshacerse en halagos hacia su hijo, explicándole por qué se había sentido tan orgullosa de él a lo largo de todo el programa. "Yo creo que tu educación, tu nobleza, tu forma de ser, tu autocontrol… Creo que no hay ningún compañero que no pueda decir cosas buenas de ti. Casi todos serán amigos tuyos fuera. Verte cada día con enfrentamientos y saber controlarte… Te doy la enhorabuena", decía. "Me siento muy orgullosa como madre. Fuera está todo fenomenal. Eres muy guapo, estás muy guapo, y no te cortes más el pelo", añadía entre risas.
Como no podía ser de otra manera, José María no dudó en responder a su progenitora con otro cariñoso mensaje: “"Gracias a ti porque esta templanza y esta educación es gracias a ti y a mi padre. Ahí dentro me acordaba de vuestras palabras. Y, sobre todo, en darle un ejemplo a mi hijo", concluía. Más tarde, cuando veía algunas de las imágenes de la colaboradora defendiéndole, José María se sentía aún más orgulloso de ella. “Sé perfectamente que me ha defendido en todo momento. Ella no ha tenido la oportunidad de acercarse a mí porque he sido yo el que se ha alejado. Darle las gracias desde aquí, por haber estado aquí cada día defendiendo, apoyándome. Deseando salir de aquí para poder comenzar de nuevo", concluía.